Capítulo Uno

El escape

Es una noche muy tranquila con una hermosa vista nocturna bajo la luz de la luna llena, a lo lejos se avista una pequeña casa de dos niveles con un pequeño sótano, la casa parece estar con tan solo un habitante en su interior. Los pequeños ruidos de los grillos nocturnos anuncian la completa soledad de los alrededores, un reloj de pared en la sala muestra la hora, 11:00 p.m.

 

 Hay un Smart tv, se ve como en la pantalla cambia la imagen de cada canal cada 2 segundos, frente a él, se encuentra un hombre que parece estar aburrido por no encontrar nada interesante en la programación de cable, presionando el botón del control remoto capar cambiar, suspira decepcionado diciendo:

 

 --“tantos canales y nada entretenido para ver, es un robo pagar tanto para no ver nada interesante”. --

 

 Mientras él dice esto en el televisor parece perderse la señal y llenarse de estática por un acto de interferencia, la cual al parecer le llena de frustración, el hombre perplejo y molesto con el proveedor de cable exclama con molestia.

 

-- “¡¡¡¡Rayos, Lo que me faltaba!!!!” ---

 

 Mientras el piensa por un instante que las conexiones estén bien y que el fallo de la señal no sea por el mal contacto de los conectores, poco a poco se escuchan frases entre cortadas y no muy claras trasmitiendo un mensaje.

 

--“¡¡sa…eeee…meee…te...!!”--

 

El hombre asombrado y con más perplejidad se  acerca lentamente al televisor, a medida que él da un paso más cerca, aparece una silueta de un hombre, a medida que daba un pasos más cerca del  televisor, se muestra una imagen más clara y se oye un audio claro y sin estática, al estar a medio metro de distancia del televisor, en la pantalla se muestra una imagen de un hombre con bata blanca desesperado, parece estar en un pequeño laboratorio muy desordenado. Se escucha una voz desesperada transmitiendo un mensaje al parecer muy importante.

 

-- “¡¡¡Debes salir de allí inmediatamente, se han enterado de todo y nos están buscando, La seguridad de tu casa fue comprometida y los sensores de proximidad fueron activados hace unos 2 minutos, tienes muy poco tiempo antes que lleguen, no tienes mucho tiempo, ya sabes que hacer, nos vemos en el lugar acordado!!!”--

 

 Tan abrupta noticia empuja al hombre frente al televisor a preguntar a gran voz:

 

--“¡¡¡ ¿cómo es posible eso?, ¿quién nos busca?!!! ¡¡¡Y ¿por qué?!!!”--

 

-- “¡¡lo siento, tienes muy poco tiempo y corres peligro, te explicare todo cuando llegues aquí!!”--

 

 Tras esto la transmisión se cierra y vuelve a su programación normal.

Él hombre con desesperación sube muy aprisa las escaleras para llegar a su dormitorio.

 

En su dormitorio se dirige con celeridad a su closet, de pie frente al closet, lo abre removiendo toda la ropa y el contenido de un lado a otro, descubriendo así un pequeño panel digital en el cual introduce un  código, 26114919920, abre una pequeña puerta metálica como una caja fuerte de cincuenta centímetros de ancho y cincuenta centímetros de alto, de su interior saca una maleta pequeña, la cual contiene un objeto de inestimable valor para él.

 

Junto a la maleta una barra negra de tres centímetros de diámetro y diez centímetros de largo, tomando ambos objetos colocando en su hombro derecho la cinta del maletín y tomando la barra con la mano izquierda, sale muy rápido de la habitación.

 

Se dirige al sótano con mucha prisa, su respiración y su corazón están muy agitados, enciende la luz y sin detenerse un segundo se dirige al otro extremo del sótano en donde se encuentra una estantería polvorienta, la sujeta y la hala con todas sus fuerzas a un lado retirándola de la pared.

 

Detrás se encuentra una pared falsa de madera, le da unos golpes retirándola y revelando así una puerta de metal la cual tiene otro panel digital en el cual ingresa el código de apertura 62221221916. La puerta se abre y ya que el tiempo ha dejado sus huellas al momento de abrirse la puerta todo el sótano se llena de polvo.

 

 Tras la puerta de metal aparece un cilindro de cristal de un metro de diámetro y de dos metros de alto, aparato que parece salido de un cuento de ciencia ficción, en el cilindro solo cabe una persona en su interior, el sujetó presiona unos botones en el panel digital, luego entra en el cilindro, lleno de mucha desesperación y empapado de sudor presiona un botón y de inmediato el cilindro da un giró para sellarse, se escucha un sonido como un viejo flash cargándose para ser disparado, el sonido aumenta intensamente, en segundos se enciende una luz blanca tornándose a un color violeta se disparan unos rayos del mismo color que empiezan a girar súbitamente alrededor del sujeto y lentamente se acercan a el desintegrándolo por completó, de inmediato comienza una cuenta regresiva de 5 minutos.

 

 En el mismo instante que el sujetó fue desintegrado, en la puerta principal de la casa, la puerta es golpeada súbitamente abriéndola en el momento, exponiendo así el interior de la casa, muchos hombres armados y capuchas negras ingresan al interior de la casa.

 

 Los hombres de inmediato empiezan a buscar habitantes por toda la casa, cinco suben al segundo piso y otros cinco bajan al sótano, mientras bajan los escalones se nota un pequeño reloj con una cuenta regresiva, mientras uno de los hombres lo nota se acerca y al verlo se sorprende y abre sus ojos con asombro y grita:

 

 ---“¡¡¡rayos!!!” ---

 

En ese instante se produce una detonación que consume y destruye toda la casa por completo, la explosión es de tal magnitud que produce un estruendo que hizo temblar la tierra a un radio de un kilómetro de distancia, algunos hombres caen a tierra por tan gran y terrible explosión, algunos fueron alcanzados por esquirlas y escombros de la casa muriendo al instante otros sólo heridos de gravedad.

 

Pasan algunos minutos al parecer algunos sobreviven al acontecimiento, algunos hombres desorientados, gimiendo de dolor se levantan y entre los sobrevivientes esta un hombre que en su rostro tiene una cicatriz en su ojo izquierdo, el sujeto se levanta muy rojo de tan grande ira por la explosión y la pérdida de sus hombres.

 

 De inmediato da órdenes con voz muy autoritaria:

 

--“¡¡¡¡comuníquenme con el doctor de inmediato!!!!”—

 

Rápidamente un hombre cercano a él con su brazo izquierdo tapando una herida en su brazo derecha le responde:

 

--“¡sí señor, ahora mismo!”—

 

 Mientras el hombre de la cicatriz en el ojo, grita con rabia:

 

--“¡¡¡ ¿cómo es posible esto?, ¿cómo se enteraron de nuestra llegada?!!!!”. --

 

Golpeando el techo de su auto, de nuevo da órdenes:

 

--“¡¡rápido, ¿dónde está el comunicador?, aahhgg, ¡¡¡esto no puede estar pasando!!!--

 

  

 A ocho kilómetros de distancia de la detonación cercana de algo que parece una pequeña cueva en una montaña se ve un destello violeta intermitente que ilumina el lugar en donde se encuentra otro cilindro similar al de la casa, mientras del interior aparece un cuerpo humano, integrándose por completo de la nada, es el mismo hombre que hace poco tiempo atrás se desintegró de aquel sótano, llevándose consigo la maleta y la barra negra, se teletransportó a esa pequeña cueva.

 

Muy rápido el hombre sale de la cueva sin perder el tiempo apartándose de ella sin detenerse, y a quinientos metros de distancia de la cueva se produce otra explosión dentro de la cueva tras él, la explosión no es tan grande como la anterior, pero fue intensa que destruyó la cueva y un radio de cien metros, haciendo que el hombre cayera a tierra por el impacto de la onda de la explosión.